Los túneles de las sierras de Pocho

Este lugar fue elegido por la gente como una de las

SIETE MARAVILLAS DE CÓRDOBA

Recorrido total desde Hosteria Posada Don Angel (ida y vuelta): Aproximadamente 150 km. Paseo recomendado para realizar en un día completo.

Para visitar los mismos debemos salir desde Hostería Posada D on Angel en  Mina Clavero hacia el noroeste atravesando luego la localidad de Cura Brochero y dirigiéndonos hacia la cuesta de nombre homónimo. Una vez subida la misma accedemos a la Pampa de Pocho. La misma es un sector agrícolo ganadero donde podremos ver a ambos lados de la ruta asfaltada diversos sembradíos y ganado vacuno.

Siguiendo por la ruta provincial N° 15, luego de recorrer unos 45 km, llegamos a la localidad de Taninga en el cruce con la ruta provincial N° 28 (ex-ruta nacional N° 20) que viene atravesando Los Gigantes desde la localidad cordobesa de Tanti.

En esta intersección debemos tomar hacia la izquierda. A poco de recorrer el mismo comenzaremos a visualizar un cambio en la vegetación y aparecerán las típicas palmeras Caranday. Con las fibras de estas palmeras los artesanos de la zona realizan cestería.

Un ícono de esta zona es el volcán inactivo Boroa, cuya figura doble cónica es inconfundible y domina la altiplanicie.

Luego de realizar parte del recorrido llegamos a una bifurcación donde podemos hacer un pequeño desvió y llegarnos al poblado de Pocho. En el mismo podremos apreciar una iglesía cuya construcción data del siglo XVIII. 

Si no deseamos hacer este desvío, seguimos por la ruta y lleganos al poblado de Las Palmas, donde la parada es obligatoria para apreciar una capilla construida en el siglo XVII. Esta es una capilla sencilla pero muy rica en imágenes y ornamento. La patrona de la misma es Nuestra Señora del Rosario.

Antes de encarar el recorrido final de Los Túneles, junto a uno de los puentes, recomendamos reservar el almuerzo en el comedor familiar "Las Aguilas" para disfrutarlo al regreso. La especialidad es el chivito a las brazas.

Siguiendo por este sinuoso camino arribaremos a las sierras de pocho y comenzaremos a encontrarnos con los túneles que la atraviesan y que permiten comunicarnos con la reserva Chancaní y los valles riojanos.

Este camino comenzó a construirse en el año 1930 y consta de 5 tuneles abiertos en el macizo serrano de Pocho y algunos puentes colgantes. Dentro de los últimos se destaca uno realizado en forma de arco y de construcción antisísmica (prueba de esto es que resistió los terremotos de 1944 y 1979).

El paisaje que se descubre constituye una de las postales más hermosas de la provincia. 

El camino serpentea a un lado de la Quebrada de la Mermela, con acantilados de más de 900 metros y entre túnel y túnel podremos apreciar hermosos paisajes, llegando luego del cuarto a una mirador desde donde podremos apreciar la mencionada reserva Chancaní y los llanos riojanos. En días cálidos con buenas correntes térmicas podremos apreciar el vuelo de cóndores y jotes. 

PARQUE PROVINCIAL Y RESERVA NATURAL CHANCANÍ

Lo que sigue después de atravesar el último túnel es un marcado descenso, pasando de una altura de unos 1450 m.s.n.m. hasta unos 320 m.s.n.m. en menos de 15 km. Esta continuación del recorrido es sólo recomendable para los muy curiosos o amantes de la naturaleza. El paisaje cambia en forma brusca se vuelve mucho más árido.

El Parque Natural Provincial y Reserva Forestal Natural Chancaní está situado en la localidad Chancani, departamento de Pocho. A pesar de su nombre, todavía está considerado solo como un Área natural protegida.

La palabra Chancaní significa “cortejando con tajos profundos”, tal vez porque las sierras de la zona ofrecen ese aspecto debido a la erosión de las aguas. Aunque también podría derivar de la voz quichua chancay, que significa “comienzo” y está relacionado con el inicio de la llanura en esta región.

Siendo de propiedad fiscal, su pie de monte y la llanura adyacente cubren una superficie de 4.920 ha. Este Parque y Reserva natural tiene por objetivo proteger una muestra de bosque chaqueño occidental y bosque serrano, que poseen características únicas por su extensión y su estado de conservación. Además actúa como importante refugio de especies desplazadas de sus ambientes por la degradación de su hábitad natural.

Entre los ejemplares de flora que encontramos se destacan el algarrobo y el quebracho colorado. También abundan piquillín, espinillo o aromo, brea y chañar.

La fauna está compuesta por peludos, quirquinchos, chancho pecarí, comadrejas, zorrinos, gato montés y puma, entre otros. La población de aves cuenta con unas 200 especies; entre las que se destacan el cóndor, diversas variedades de pájaros carpintero ( real amarillo, carpintero negro, de copete colorado ), caranchos, chimangos, jotes, águilas, aguiluchos, lechuzas, cardenales amarillos y colorados. También hay víboras como la cascabel chica, yarará común, coral musaraña y lampalagua. Por último también podremos encontrar lagartos oberos y colorados.

Una red de caminos internos y picadas para uso peatonal, permiten recorrer la reserva casi en su totalidad, aunque por su aislamiento y distancia de los grandes centros urbanos, se deben tomar los recaudos necesarios antes de emprender la visita a la misma. A los interesados en conocer este ambiente biogeográfico les recomendamos llegar hasta el Centro de Interpretación de la Reserva, donde hay sendas autoguiadas y una zona para acampar, con sanitarios y quincho.

Regreso

Como alternativa, para no regresar todo el camino por los mismos paisajes de la ida, una vez que volvimos al asfalto, retomar hacia Hostería Posada Don Angel y Mina Clavero y a los pocos kilómetros tomar el desvío hacia la localidad de Ambul. Así hacer el regreso por un camino de ripio que va más cerca de la montaña, con pintorescos paisajes y cristalinos arroyos. Por el mismo pasaremos por los pueblos de Ambul, Santa Rosa, El Mirador, Panaholma y San Lorenzo. Ingresando a Mina Clavero desde el norte por calle San Martín.